Autor: Patrick Rothfuss
Editorial: Debolsillo
Canción Identificada: Thirteen Autumns and a Widow (Cradle of Filth)
Sinopsis:
«Todo hombre sabio teme tres cosas: la tormenta en el mar, la noche sin luna y la ira de un hombre amable.»
El hombre había desaparecido. El mito no. Músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, trotamundos, héroe y asesino, Kvothe había borrado su rastro. Y ni siquiera ahora que le han encontrado, ni siquiera ni siquiera ahora que le han encontrado, ni siquiera ahora que las tinieblas invaden los rincones del mundo, está dispuesto a regresar. Pero su historia prosigue, la aventura continúa, y Kvothe seguirá contándola para revelar la verdad tras la leyenda.
Opinión:
Va a ser realmente complicado expresar con palabras este libro, e incluso si llegase a escribir más allá de las exclamaciones de euforia que por dentro componen mis venas junto con la adrenalina de esta novela, seguiría sin hacer justicia a la maravilla que ha supuesto leerse El Temor de Un Hombre Sabio...
...Libro que no podía faltar en mi estantería, en especial tras haberme sorprendido con el primer libro al disfrutarlo en gran medida, asombrándome de que la primera vez no hubiese sido capaz de ver la gran epicidad de esta saga. Por ende, estoy completamente segura que lo mismo ocurrirá con este libro.
La previamente mencionada adrenalina no tiene que ver con la cantidad de acción que haya en el libro, como probablemente en un principio haya parecido. Con ese término me refiero a algo mucho más profundo y menos sencillo de explicar. Para ello habría que vivirlo.
No es un libro que abunde de acción. La adrenalina y la euforia de esta novela, sin embargo, van más allá que de cualquier otra historia de fantasía que haya leído, porque, aunque en el exterior los acontecimientos no sean desenfrenados, internamente en los personajes no hay tiempo para el descanso, es una lucha tras otra, una búsqueda por las respuestas a las preguntas más deseadas e imposibles que el ser humano se ha hecho a lo largo de la historia, una batalla interior increíblemente bien conseguida.
El personaje evoluciona, y tú lo haces con él, viviendo al máximo cada una de sus emociones, tan bien descritas que te sientes completamente en su piel. Y eso sí que es adrenalina y euforia en su estado más potente.
El personaje evoluciona, y tú lo haces con él, viviendo al máximo cada una de sus emociones, tan bien descritas que te sientes completamente en su piel. Y eso sí que es adrenalina y euforia en su estado más potente.
"No me extingo. Aunque estoy empapado de ti, ardo. El movimiento de tu cabeza al volverse es como una canción. Es como una chispa. Es como un aliento que me infla y sopla para evitar un fuego que extenderse y rugir tu nombre no puede evitar."
Esta saga tiene millones de cosas buenas, pero si hay algo que resaltar son sus personajes... y su magnífica y envidiable prosa.
Pero, antes que nada, comenzaré por el principio, por su trama:
Segundo día en el que este atractivamente ambiguo y misterioso personaje nos narra sus memorias, desenterrando la leyenda que tantos rumores ha causado, que tanta gente ha admirado y temido. Kvothe, nuestro protagonista, no puede ser descrito de otra manera: es una verdadera leyenda, un enorme misterio incluso para el lector, incluso cuando está leyendo acerca de su recorrido por su pasado.
“Si quieres saber quién eres, camina hasta que no haya nadie que sepa tu nombre. Viajar nos pone en nuestro sitio, nos enseña más que ningún maestro, es amargo como una medicina, cruel como un espejo. Un largo tramo de camino te enseñará más sobre ti mismo que cien años de silenciosa introspección.”
“Si quieres saber quién eres, camina hasta que no haya nadie que sepa tu nombre. Viajar nos pone en nuestro sitio, nos enseña más que ningún maestro, es amargo como una medicina, cruel como un espejo. Un largo tramo de camino te enseñará más sobre ti mismo que cien años de silenciosa introspección.”
A todo aquel que se haya leído este libro: hay que admitirlo; si se ha continuado con la saga ha sido, en gran medida, por Kvothe. Y esta segunda entrega no decepciona en ese aspecto en absoluto. Es más, lo mejora:
Kvothe ha sido, desde las primeras páginas, un personaje impresionante. Era inaudito cuando leías sobre él en el presente en el primer libro y luego te transportaba la historia al pasado, y veías a una persona completamente diferente, tan lejana al Kvothe que narra la historia que parece imposible que se trate del mismo joven. Y luego, a medida que avanzamos en el libro, las piezas del puzle y todos esos secretos a desvelar comienzan asalir a la luz, y entonces, de pronto, me encontré con que el libro había acabado... y entonces, rememorando, me di cuenta de lo mucho que el Kvothe de la historia se parecía ya al actual.
Aún había grandes y notables diferencias, pero es que la evolución había sido tan increíble y realista a lo largo de la novela que sin enterarme poco a poco el protagonista había ido progresando.
“Quizá todo esto os parezca macabro, pero la vida es así. Los saqueadores acaban siendo saqueados, y el tiempo nos hace mercenarios a todos.”
Aún había grandes y notables diferencias, pero es que la evolución había sido tan increíble y realista a lo largo de la novela que sin enterarme poco a poco el protagonista había ido progresando.
“Quizá todo esto os parezca macabro, pero la vida es así. Los saqueadores acaban siendo saqueados, y el tiempo nos hace mercenarios a todos.”
Es absolutamente chocante cuánto se esconde en esta historia en cuanto a los personajes.
En especial, en relación con el principal. En este segundo libro ha pasado exactamente lo mismo: el Kvothe del pasado se ha ido acercando más y más al de la actualidad, mientras al lector le siguen asaltando mil y una dudas y por dentro se está muriendo por enterarse de cada evento que le haya pasado.
En especial, en relación con el principal. En este segundo libro ha pasado exactamente lo mismo: el Kvothe del pasado se ha ido acercando más y más al de la actualidad, mientras al lector le siguen asaltando mil y una dudas y por dentro se está muriendo por enterarse de cada evento que le haya pasado.
El libro engancha desmesuradamente, de una forma tan fuerte y atrapante que es imposible dejar el libro durante más de un par de horas.
La trama me ha parecido que tenía un ritmo más lento hasta prácticamente la mitad del libro, pues aún Kvothe sigue en la universidad y tantas páginas de ella comenzaban a hacerse algo pesadas. Pero tras la mitad del libro, el avance de la novela fue mucho más ágil y fluido, y, lo que es más importante, se recorría en mayor medida que en el anterior libro el mundo, descubriendo muchísimas cosas alucinantes y extremadamente imaginativas, seres increíbles y formas de comunicación entre ellos distintas, nuevas y muy creativas.
Era un verdadero descubrimiento saber más acerca del mundo creado de Patrick Rothfuss, porque con este libro ha logrado de nuevo que tenga un elemento más de admiración hacia su gran obra que es esta saga.
“Amamos lo que amamos. La razón no entra en juego. En muchos aspectos, el amor más insensato es el amor más verdadero. Cualquiera puede amar algo por algún motivo. Eso es tan fácil como meterse un penique en el bolsillo. Pero amar algo a pesar de algo es otra cosa. Conocer los defectos y amarlos también. Eso es inusual, puro y perfecto.”
“Amamos lo que amamos. La razón no entra en juego. En muchos aspectos, el amor más insensato es el amor más verdadero. Cualquiera puede amar algo por algún motivo. Eso es tan fácil como meterse un penique en el bolsillo. Pero amar algo a pesar de algo es otra cosa. Conocer los defectos y amarlos también. Eso es inusual, puro y perfecto.”
Cada detalle de estas series está detallado al milímetro, cada elemento del mundo asombroso y original, y he disfrutado muchísimo descubriendo todas las cosas que Rothfuss nos iba enseñando a lo largo dela trama sobre el mundo. Aunque no se me ha hecho tan llevadera como en el anterior, principalmente por la interrupción de la larga estancia en la universidad y de los momentos en los que salía Denna de pronto, los momentos en los que Kvothe actuaba por su cuenta y riesgo eran, como en el primero, los mejores, y el libro sigue un ritmo constante que no se debilita o flaquea en ningún momento de la trama.
Por otro lado, hablemos de los interludios con el presente... ¡¡¡¡GENIALES!!!! ¡¡Millones de veces mejores que en el primer libro y, además, mis ruegos han sido oídos por el escritor, eran más numerosos, y también presentaban cierta intriga y acción simplemente inrechazables!
Se ha visto con más detalle la personalidad del Kvothe del presente (aunque aún poco, de forma que sigo deseando saber más de él), y reitero de nuevo y todas las veces que haga falta: KVOTHE ES EL PERSONAJE MÁS ÉPICO DE TODOS LOS TIEMPOS.
Es, tal y como la historia afirma y como todo lector puede comprobar, una leyenda, y la razón de que esta saga esté para mí tan valorada, con una evolución increíble, unos diálogos asombrosos y que despiertan una gran controversia, y una forma de ser liberal y a la vez mágica, escrita de forma suave pero poderosa, sin dejarse ni un sólo detalle del personaje y explorando al máximo las emociones y los debates internos del protagonista (sobretodo en este libro, algo que me ha encantado). Sensacional.
“La mayoría de los secretos son secretos de la boca. Chismes compartidos y pequeños escándalos susurrados. Esos secretos ansían liberarse por el mundo. Un secreto de la boca es como una china metida en la bota. Al principio apenas la notas. Luego se vuelve molesta, y al final, insoportable. Los secretos de la boca crecen cuanto más los guardas, y se hinchan hasta presionar contra tus labios. Luchan para que los liberes. Los secretos del corazón son diferentes. Son íntimos y dolorosos, y queremos, ante todo, escondérselos al mundo. No se hinchan ni presionan buscando una salida. Moran en el corazón, y cuanto más se los guarda, más pesados se vuelven. Teccam sostiene que es mejor tener la boca llena de veneno que un secreto del corazón. Cualquier idiota sabe escupir el veneno, dice, pero nosotros guardamos esos tesoros dolorosos. Tragamos para contenerlos todos los días, obligándolos a permanecer en lo más profundo de nosotros. Allí se quedan, volviéndose cada vez más pesados, enconándose. Con el tiempo, no pueden evitar aplastar el corazón que los contiene. Los filósofos modernos desprecian a Teccam, pero son buitres picoteando los huesos de un gigante. Cuestionad cuanto queráis: Teccam entendía la forma del mundo.”
Unas de las mejores partes del libro han sido, en definitiva, los interludios del libro, donde además de que estaban más cargados de acción también dejaban de ver gran parte de los personajes del presente: Kvothe, Bast, Cronista... todos ellos con unas personalidades más labradas, más detalladas, y entre ellos con una relación verdadera y muy bien llevada.
Puede que, con este ritmo que llevaba la novela tan lleno de magia y misterios, me esperaba un final con algo más de acción, o algo más intenso, pero, por lo general, tampoco fue insatisfactorio, y en parte lo que hacía era ser leal a toda la trama del libro, con su constante subida, la saga presentando su propia evolución.
¿Qué decir de este libro que no se haya dicho, que no haya sido hablado, criticado, o admirado?
El temor de un Hombre Sabio es un libro en todos los sentidos impresionante, una obra de arte, en la que en cada página te encuentras un nuevo tesoro.
“La poesía es una canción sin música. Y una canción sin música es como un cuerpo sin alma.”
Nuevamente, el escritor ha hecho que reafirme mi gran admiración por su prosa... una prosa llena de precioso vocabulario, pero así mismo simple y fresca, sin enredarse, sin extenderse en exceso con las descripciones, y creando verdadera magia con sus bellas palabras. Era como leer un poema, una armonía de palabras que estaban ordenadas en el orden exacto para que creasen un millar de sensaciones dentro de ti. Si hay algo que señalar especialmente de esta magnífica saga es, sin lugar a dudas, Kvothe y la prosa de Patrick Rothfuss.
“La muerte era como un vecino desagradable: no hablabas de el por temor a que te oyera y decidiera pasar a hacerte una visita.”
El Temor de un Hombre Sabio es un libro inaudito, distinto al anterior y al mismo tiempo con las mismas características que hacen de los dos una saga de lo más evolutiva y única.
“La mayoría de los secretos son secretos de la boca. Chismes compartidos y pequeños escándalos susurrados. Esos secretos ansían liberarse por el mundo. Un secreto de la boca es como una china metida en la bota. Al principio apenas la notas. Luego se vuelve molesta, y al final, insoportable. Los secretos de la boca crecen cuanto más los guardas, y se hinchan hasta presionar contra tus labios. Luchan para que los liberes. Los secretos del corazón son diferentes. Son íntimos y dolorosos, y queremos, ante todo, escondérselos al mundo. No se hinchan ni presionan buscando una salida. Moran en el corazón, y cuanto más se los guarda, más pesados se vuelven. Teccam sostiene que es mejor tener la boca llena de veneno que un secreto del corazón. Cualquier idiota sabe escupir el veneno, dice, pero nosotros guardamos esos tesoros dolorosos. Tragamos para contenerlos todos los días, obligándolos a permanecer en lo más profundo de nosotros. Allí se quedan, volviéndose cada vez más pesados, enconándose. Con el tiempo, no pueden evitar aplastar el corazón que los contiene. Los filósofos modernos desprecian a Teccam, pero son buitres picoteando los huesos de un gigante. Cuestionad cuanto queráis: Teccam entendía la forma del mundo.”
Unas de las mejores partes del libro han sido, en definitiva, los interludios del libro, donde además de que estaban más cargados de acción también dejaban de ver gran parte de los personajes del presente: Kvothe, Bast, Cronista... todos ellos con unas personalidades más labradas, más detalladas, y entre ellos con una relación verdadera y muy bien llevada.
Puede que, con este ritmo que llevaba la novela tan lleno de magia y misterios, me esperaba un final con algo más de acción, o algo más intenso, pero, por lo general, tampoco fue insatisfactorio, y en parte lo que hacía era ser leal a toda la trama del libro, con su constante subida, la saga presentando su propia evolución.
¿Qué decir de este libro que no se haya dicho, que no haya sido hablado, criticado, o admirado?
El temor de un Hombre Sabio es un libro en todos los sentidos impresionante, una obra de arte, en la que en cada página te encuentras un nuevo tesoro.
“La poesía es una canción sin música. Y una canción sin música es como un cuerpo sin alma.”
Nuevamente, el escritor ha hecho que reafirme mi gran admiración por su prosa... una prosa llena de precioso vocabulario, pero así mismo simple y fresca, sin enredarse, sin extenderse en exceso con las descripciones, y creando verdadera magia con sus bellas palabras. Era como leer un poema, una armonía de palabras que estaban ordenadas en el orden exacto para que creasen un millar de sensaciones dentro de ti. Si hay algo que señalar especialmente de esta magnífica saga es, sin lugar a dudas, Kvothe y la prosa de Patrick Rothfuss.
“La muerte era como un vecino desagradable: no hablabas de el por temor a que te oyera y decidiera pasar a hacerte una visita.”
El Temor de un Hombre Sabio es un libro inaudito, distinto al anterior y al mismo tiempo con las mismas características que hacen de los dos una saga de lo más evolutiva y única.
PUNTUACIÓN
♫ Acción: 3.5/5
♫ Personajes: 6/5
♫ Originalidad: 5/5
♫ Trama: 4/5
♫ Desenlace: 4/5
♫ Pluma: 5/5
♫ Originalidad: 5/5
♫ Trama: 4/5
♫ Desenlace: 4/5
♫ Pluma: 5/5
VALORACIÓN PERSONAL: 10/10
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