RESEÑA:
RANT
Título: Rant
Autor: Chuck Palahniuk
Editorial: Anchor Books
Canción Identificada:
Sinopsis:
Autor: Chuck Palahniuk
Editorial: Anchor Books
Canción Identificada:
Sinopsis:
Buster “Rant” Casey just may be the most efficient serial killer of our time. A high school rebel, Rant Casey escapes from his small town home for the big city where he becomes the leader of an urban demolition derby called Party Crashing. Rant Casey will die a spectacular highway death, after which his friends gather the testimony needed to build an oral history of his short, violent life.
Opinión personal:
Opinión personal:
Como seguramente a muchos de los lectores de Palahniuk, encontré aún más motivo para leerme este libro cuando eché una ojeada a las reseñas, en concreto, a las que mostraban el horror de gran parte de los lectores.
Porque lectores hay de todo tipo, y hay a los que les gusta poder respirar correctamente leyendo un libro, y los que te piden directamente que les des un vaso de ácido.
Me he encontrado en diversas plataformas a gente despotricando contra este escritor: su inconsistencia, lo "desvergonzado" que es, cómo parece que la gente lo busca tan solo porque genera mucho morbo y consigue ser un superventas por los temas tan peliagudos de los que trata... sexo, muerte, abusos, violaciones, mentiras, manipulaciones, sexismo, incitaciones a la violencia... la lista es larguísima.
Luego, hay quienes también despotricaron acerca de cómo era el protagonista de esta novela en concreto: una mala persona, dicen; pero encima, una mala persona que no pueden comprender.
Como uno de ellos ha dicho, "this book seemed to be over the top in grossness", así como que se apoyaba únicamente en el componente de shock.
Tampoco es que tenga que sorprender demasiado esto, porque ese es Palahniuk: quiere dar un mensaje, te guste o no, y te lo da.
¿Y qué pasa entre medias?
Que cuando uno está enfadado con un aspecto del mundo, y quiere dar un mensaje de furia al mundo, lo que le sale es precisamente una narrativa perturbadora, que trata de revelar la parte más cruda y compleja del ser humano.
Y no, no me refiero a que salgan vísceras colgando de los estómagos abiertos de la gente, ni nada por el estilo.
Hablo de que leer a Palahniuk es como masticar una suela de un zapato; lo pasas mal, te sabe mal, a veces hasta te entran arcadas.
“Picture the moment when your mom and dad first saw you as something other than a pretty, tiny version of them. You as them, but improved. Better educated. Innocent. Then picture when you stopped being their dream.”
¿Por qué hay quienes se acaban tragando entera esta suela de zapato? Porque por muy lijada que esté al tacto, por muchas heridas que te deje en la lengua y en el paladar, aun con lo desagradable que sea algunas veces, o lo perturbador que es darte cuenta de lo que estás haciendo, hay dos factores que amas en este proceso: lo primero es que es divertido, la idea de comerse un zapato ya de por sí te saca sonrisas... y la prosa de Palahniuk, tan sórdida pero tan sarcástica, revela una sátira increíblemente sagaz de nuestros días.
Y en segundo lugar, es que encima es un zapato DE CALIDAD. Da igual si no sabe a flores o si no sabe a "normalidad"; es un zapato moderno, pero al que le gusta quedarse viejo y de mal sabor a propósito, para que se vean las incongruencias de nuestro mundo.
Por eso muchos de los lectores de este escritor sencillamente dicen: "trae para acá el vaso con ácido, que le voy a dar un trago". Porque les gusta esta sensación de destrucción que se genera en su propio cuerpo: saber que te está derrumbando con cada frase, haciéndote plantearte cada detalle.
“Kids grow up connected to nothing these days, plugged in and living lives boosted to them from other people.”
Otra cosa que me divirtió antes incluso de cogerme la novela fue todo lo que se despotricaba de ella, que en inglés se traduce como "rantings"... que es justamente el título que me sugería la obra.
El libro ha causado un EFECTO, eso sin duda, y esa es su intención. Quiere dejarte las cosas claras y mucha gente no se lo toma bien.
Y tampoco creo que sea una lectura para todo el mundo; va por gustos, pero también tienes que estar preparado, envuelto en lo que te va a recoger durante varios días. Tienes que ver el mundo desde los ojos de la furia -digamos rabia, que queda mucho mejor-: tienes que reconocer, finalmente saber ver, que el mundo está hecho mierda.
Y que entre tanta basura y tanto ácido y suelas de zapato que te alimentan a duras penas, está esa sonrisa gélida que tiene la vida, ese desafío que nos pone. Nos anima a autodestruirnos, nos pone a prueba. Es un experimento que siempre le da muy buenos resultados.
Veamos qué resultados ha sacado Palahniuk esta vez con este libro...
¿De qué trata?
Para empezar, diré de qué no trata. Acabaremos mucho antes. Pues bien: no trata sobre insensibilización.
Y de verdad que yo creía que trataría sobre esto. Quiero decir, el protagonista es un asesino en serie, algo insensible yo me lo esperaba... Pero para nada.
“Ask yourself: What did I eat for breakfast today? What did I eat for dinner last night? You see how fast reality fades away?”
He vuelto a descubrir que Chuck Palahniuk genera novelas sensibles con el contexto social, novelas que marcan un antes y un después precisamente porque conectan al completo con el ser humano.
Con sus personajes excéntricos, grotescos, prácticamente salvajes, Palahniuk elabora un mundo que es exactamente como el nuestro, a excepción de que todo tiene ángulos afilados, no hay nada que nos acomode, sino que todo pincha. Es un mundo en el que estás incómodo desde que entras, desde que pones un pie en su novela.
¿De qué trata entonces? Pues bien; la historia gira en torno a una memoria social. Un recuerdo compartido. En un entorno bastante pequeño, todos han conocido, u oído hablar, de Buster "Rant" Casey, el chico raro de su colegio, de su pueblo, de su clase, que ya apuntaba maneras desde pequeño.
Tenía en él la marca de la muerte; no es que se le deparara morir, simplemente, él encontraba goce sabiendo que podía poner su vida en juego en todo momento. Controlando la situación, evaluando los daños.
“Beginning with Santa in infancy, and ending with the Tooth Fairy as the child acquires adult teeth. Or, plainly put, beginning with all the possibility of childhood, and ending with an absolute trust in the national currency.”
Las teorías psicológicas del desarrollo atribuyen muchas veces que los niños siempre piensan en un modelo, a veces real y otras veces más bien ideal, para imitar y diseñar quiénes van a ser en el futuro, o quiénes, al menos, quieren ser.
Pero Rant Casey es precisamente ese modelo de partida en el que nadie antes ha querido reparar.
Rant Casey es un prototipo de hombre que cuesta comprender precisamente porque el chico pone toda la intención en ser todo lo que nadie más se atreve a ser. Se da cuenta de la hipocresía y la devaluación que hay en el mundo. La rabia que siente hacia las estructuras sociales, que colocan todo entre almohadas y privan de la libertad de expresión, lo convierte al inicio en blanco de miradas críticas... que se van volviendo de admiración.
No puedo hablar en nombre de Rant, pues él está presente tan solo en los demás, pero sí decir que el resto de narradores hacen ver que están gobernados por la tóxica presencia de este chico. Tóxica en el sentido más estricto de la palabra: es puro veneno, pura infección, pura rabia, que se contagia con tan solo la transmisión de la saliva.
También es una historia donde crece el amor, un amor que en realidad es básico y tan solo busca aspirar a algo mayor... no es romance, y tampoco hay otros temas como la amistad o la familia, pero sí que se reluce la alianza que se va formando entre diferentes personajes...
Rant, que acaba por marcharse de casa en busca de un sentido en la vida más extraordinario, acaba por fundar un grupo de seguidores que montan las llamadas Party Crashing, que consisten en una especie de organización que se dedica a estrellar coches en desguaces, y a matar en accidentes de carretera a gran número de personas.
“Beginning with Santa Claus as a cognitive exercise, a child is encouraged to share the same idea of reality as his peers. Even if that reality is patently invented and ludicrous, belief is encouraged with gifts that support and promote the common cultural lies.
The greatest consensus in modern society is our traffic systems. The way a flood of strangers can interact, sharing a path, almost all of them traveling without incident. It only takes one dissenting driver to create anarchy.”
Al final, como sucederá también con Rant, el propio concepto de Party Crashing se desdibuja en la historia, hasta pasa, de ser algo objetivo y siniestro, a convertirse en un ideal al que todos aspiran, el método en el que la mayoría dicen que, finalmente, en sus vidas eran capaces de conseguir algo, de sentir algo, de saber que estaban vivos.
Sin freno, a todo motor, con la amenaza de la ruina... solo así el ser humano de la actualidad puede comprender hasta qué punto su presente pende de la fragilidad que hay entre la vida y la muerte...
Una trama hipnótica, sugerente, persuasiva, divertida, y con muy aguda crítica social
Las temáticas del libro son tan diversas que no tiene sentido exponerlas, pero sí que podrían resumirse en un "Aquí, y ahora, nosotros estamos hartos de esta vida".
Alguien ha decidido cambiar el curso de sus vidas, marcar un punto de inflexión en la historia de la humanidad. Ese alguien es Rant.
“After a good-looking boy gives you rabies two, three times, you'll settle down and marry somebody less exciting for the rest of your life”
La trama de la historia es muy sugerente, porque te envuelve desde la primera página, puede ser desagradable porque a veces es gráfica, pero, en contra de lo que dicen la mayoría, no creo que sea simplemente por puro morbo por lo que se ha escrito: la historia de Rant se recrea en lo turbulento precisamente porque es la vía de escape, el motor de la historia, lo único que moviliza a los personajes.
Y se recrea de manera muy sofisticada, porque cuestiona, además, el funcionamiento de todo esto, de nuestros propios engranajes sociales e individuales.
Palahniuk razona bastante con este escrito, y, sobre todo, saca una burla muy afilada, dirigida a todo lo que nos rodea, a cada palmo que tocamos, incluso se atreve a burlarse de sus propios personajes, los cuales, aunque tratan de sobrevivir en un mundo que ha escalado a la locura, también son víctimas, y partícipes, de este juego humano que hacemos de la vida.
Todos tienen su papel de culpa, y todos reciben su parte de castigo.
Lo más interesante de todo esto es el extraño surrealismo que abarca toda la novela desde la primera página (y que se va incrementando mediante avanzamos)... La historia, que está perfectamente hilada y con partes muy bien divididas y muy bien argumentadas, también es una oda a lo imposible, el mensaje que nos da es que los asesinatos que se llevan a cabo no son en sí mismos la solución, ni el método que se emplea para escapar de la prisión de la realidad... lo que sí que nos da una salida es la imaginación, la broma, el descaro, las vivencias internas, nuestra manera de dirigirnos al mundo, y de procesar lo que el mundo, a su vez, quiere decirnos. Pone especial hincapié en el individualismo, en rechazar todo lo que, por considerarse común o normativo, se cree que va a ser más seguro o más positivo.
“Also consider that someday, when you’re dead and rotted, kids with their baby teeth will sit in their time-geography class and laugh about how stupid you were.”
La desesperanza que hay en el libro, la lucha de los personajes por entenderse... No solo por entender a Rant, también, y sobre todo, quieren entender el contexto en el que están metidos, ese caldo que los cuece a fuego lento y que quiere sacar provecho de ellos, aunque ninguno tiene idea de qué forma...
Rant es, nuevamente, una REACCIÓN ante un proceso social que se está dando actualmente. Nos grita que actuemos. Y nos hace reírnos, a su vez, de lo insignificantes que somos incluso para marcar diferencia en un mundo que tiene billones y billones de personas, y que va en aumento.
Juega con nosotros, a veces nos desespera. Nos lleva por el mal camino, pero nos encauza otras veces a tomar decisiones más correctas... Habla de influencia, de persuasión... nos seduce con su prosa atrevida y llena de agallas, nos encadena a su prisión de humor, burla, despecho, y mucha crueldad. Nos retuerce, nos critica cosas a la cara, también nos fuerza a meternos en la historia, a ser uno más.
“I came to Party Crashing because accidents happen. People you love will die. Nothing you treasure will last forever. And I need to accept and embrace that fact.”
Y el libro se vuelve extremadamente hipnótico precisamente por la manera en la que se cuentan las cosas, de manera ligera, divertida, pero con unos puntazos en la historia que me dejaron sin palabras.
Hay muchísimo detalle en la novela, me parece que Chuck Palahniuk es de los que desmenuzan primero el mundo, y, parte por parte, lo van intentando dar a conocer "a su manera", con un estilo personal, íntimo, curioso, malicioso.
Coge cada detalle, pone ejemplos muy concretos, nos sitúa en la realidad precisamente por la concreción que hace de cada evento y cada rasgo particular de los personajes. Por ejemplo, un narrador, que vende coches, habla A SU MANERA, es decir, se vez en cuando suelta joyitas de comentarios sobre su trabajo, sobre los coches, sobre cómo uno puede ser bueno o malo vendiéndolos... estrategias que tiene, cómo, en la historia, compara a veces cosas que pasan con su propia vida personal, aun si parece no venir a cuento... Para ese narrador, tiene sentido que la vida de Rant se ligue a la suya propia y a su universo de coches, y es lo que hace: aporta plena subjetividad al relato, una voz diferente que en cada narrativa no se parece a la anterior.
Una prosa firme, burlesca, definida, impúdica, vista como "indecente"... y absolutamente sensacional gracias a su astucia y su gigantesca carga de crítica social
La prosa de Palahniuk yo creo que es algo de lo que ya he hablado hasta la saciedad, pero es que tengo la sensación de que en este libro en concreto se ha superado.
Sigue siendo muy detallista, muy específico con las cosas (olores muy concretos, sabores muy determinados, momentos perfectamente definidos, y ejemplos que va poniendo de la vida real que son irrefutables precisamente por lo bien que describen a nuestro mundo). Palahniuk domina esta concreción de la que estoy hablando, desglosa al máximo la existencia humana para que veamos cada parte irracional de la misma por separado: lo que en su conjunto parece estar organizado, cuando lo miramos con lupa, vemos que es completo caos.
“This is how fast your life can turn around. How the future you have tomorrow won't be the same future you had yesterday.”
Otro tema a destacar es la sordidez y la suciedad de esta novela... Los ejemplos que pone son cercanos al realismo sucio, los personajes están tan sometidos a la vida cotidiana que a veces se desdibujan y entran en crisis...
Hay enganche en la historia debido a lo grotesca que ésta es a veces, el humor que pone al dar toques de sátira a cada evento que, en cualquier otro libro, habría estado cargado de pesadumbre y tono lúgubre... Palahniuk da "marcha" a la historia, da ritmo, da música, da color, da forma... Existe siempre ese "ruido" de fondo de cosas desagradables, sucias, sexuales, críticas hacia el mundo... muy gráficas, a veces muy explícitas... pero es que es un auténtico diamante en bruto debido a que no las expone y ya, les da calor, presencia, textura, hace que se vean reales, pero también hace que se vean risibles, que te puedas reír de ellas, burlarse, humillarlas... Echarte carcajadas de sorpresa, asombro y cierta vergüenza por todo lo bien que te identificas con el momento.
“Life's greatest comfort is being able to look over your shoulder and see people worse off, waiting in line behind you.”
El asco que sienten los personajes hacia la vida en el fondo se parecía al mío; en efecto, despotricaban, como dice el título (aunque ya se verá que el significado mismo del título es otro), a veces sin venir a cuento, sin contexto, solo porque estaban hartos. Cargaban todo de emoción, intensidad, descaro, libertad de expresión.
Lo llenaban todo de humor y crítica lacerada y punzante, hecha para dañar, y hecha, también, para que nos divirtamos. Este juego que hace Palahniuk entre crear ambientes sórdidos y perturbadores, sucios y hasta escatológicos, pero darles una identidad propia y llena de sátira, me parece que es el verdadero encanto que tienen sus libros... la gran seducción que traen, siempre siempre, sus historias.
Un análisis del planteamiento de la "persona libre ideal": ¿puede ser que, cuanto más despersonificado e inhumano es uno, más lo veamos como alguien libre de toda atadura humana y social?
Si algo aprecio muchísimo de los personajes de Chuck Palahniuk, tales como Tyler Durden en Fight Club, Victor Mancini en Choke, o aquí mismo Rant Casey en Rant, es que son antihéroes, pero, aun así, o precisamente justo por eso, son la salvación del planeta en su totalidad.
Todos ellos son personajes poco convencionales, dudosos, con moralidad ambigua. Algunos son fracasados, otros encuentran el éxito en lo depravado y la violencia... Todos ellos buscan una SALIDA.
En mayúsculas lo pongo. El mundo actual gira en círculos, historias que se repiten, hábitos que se siguen a rajatabla. El síndrome del burnout laboral está muy presente en nuestras vidas. Muchos llegamos a casa, ya bien de la escuela o del trabajo o de donde sea, y nos encontramos mayores desilusiones: el lavavajillas no está limpio, la lavadora se ha atascado, no queda casi comida en la nevera y la Navidad que se acerca es otro gasto económico muy grande, con enormes cenas en las festividades, reuniones en familia que a veces ponen dolor de cabeza, y, sobre todo, el constante deber que tenemos, obligados como criaturas sociales, a poner buena cara e integrarnos en un mundo social sin el que no podemos vivir.
“The big reason why folks leave a small town,' Rant used to say, 'is so they can moon over the idea of going back. And the reason they stay put is so they can moon about getting out.'
Rant meant that no one is happy, anywhere.”
Y no podemos vivir sin él porque, si marcamos una diferencia, ya no encajamos con el resto de las piezas. Así que lo que hacemos es acomodarnos a los esquemas sociales, hasta que nos metemos tanto en ese agujerito que dejamos de ser nosotros mismos. Nos vamos comiendo poco a poco hasta poder entrar por esa rendija que da a la felicidad grupal, que no siempre coincide con la individual.
“We all have this moment, when your folks first see you as someone not growing up to be them.”
Estamos a salvo, pero estamos metidos entre pared y pared, atrapados en las redes de la interacción humana. Y no hay escapatoria posible de esta vida que se repite cada día, con el mismo patrón, con la misma crisis existencial. Uno está tanto tiempo pensando en si hay que elegir champú de camomila o mejor de lavanda que, de pronto, cuando se da cuenta de la insignificancia de su vida, cae en picado.
Pero los personajes de Palahniuk, que están atados como todos nosotros a estas dinámicas, cortan con ello desde la raíz. Estrangulan a madre tierra con las propias raíces del árbol de ésta. Nosotros como seres humanos, que somos el fruto de tanto trabajo evolutivo, queremos decir, finalmente, "basta".
El ser humano se ha estado moviendo a costa de la adaptación y supervivencia de la especie, para asegurarnos que nuestros descendientes heredan los genes correctos y dejan más descendencia. Estamos programados para ello, hasta en los aspectos que menos nos esperamos.
Y entonces, ¿cuál es la "metáfora del asesino"?
He decidido llamarla de esta manera por una razón: porque un asesino va contra natura. Si matara para protegerse a sí mismo, o a su progenie, seguiría asimilando el control que la genética tiene sobre él. Pero de pronto, cambia la situación: uno queda tan quemadísimo de tanto mundo social y tanto buscar aceptación grupal que acaba por matar a unos cuantos.
Patrick Bateman lo hizo, tan solo para sentir escapatoria a su mundo de economía, éxito, ventas y superficialidad.
Y Rant Casey hace otro tanto, pero, en su caso, tiene más que ver con la libertad. Rant no busca el placer o la satisfacción; Rant busca ser el dueño de cada movimiento que haga. Buscar la estabilidad en el caos. Llenar todo de penumbra, que solo se iluminen las luces de los faros de su coche, mientras atraviesa a toda velocidad la autovía, con toda la pinta de que acabará en accidente.
Rant Casey es probablemente de las figuras más complejas que me he encontrado en toda la literatura. No es un asesino tan refinado como en muchos libros tratan de ponerlos (por ejemplo, Hannibal Lecter, que se sale de la norma con su intelectualidad y sus buenos modales)... Rant Casey es barbáricamente excéntrico, pero es pura dinamita emocional.
Rant tiene el control, sabe lo que quiere, pero es humano en su plenitud. No se puede culpar a la genética de haberlo creado tan villano, cuando ha sido su propia experiencia la que le ha dado su contorno de extraordinario.
Y me encanta como personaje porque es carismático, extraño, "errático", nadie sabe muy bien qué pensar de él.
A veces, los manifiestos de sus conocidos se contradicen entre sí, y esto se hace a propósito para que se vea la complejidad del ser humano: lo que creemos que es alguien, se debe a nuestra interpretación de él.
Si Rant es un loco que muere de manera espectacular, "a lo grande", se debe a cada memoria que se recoge de sus seres queridos, de sus admiradores. Rant es un infame de pies a cabeza, un tipo sin escrúpulos, muy "rarito", pero también con un sentido de la moralidad que no está falto, quizá solo algo retorcido.
En contra de cómo los adultos siempre han tratado de inculcarle un modo de ver la vida, él, a medida que crece, hace lo contrario: desafiará a las pautas sociales y demostrará que la frontera entre el bien y el mal, e incluso entre la vida y la muerte, es relativa.
Y que solo importa el momento, el presente, y el mensaje que vayas a dar. Dejar huella. Pasar a la historia. Y, sobre todo, saber quién eres: si eres el que se somete a las masas, o si eres una oveja negra que, aunque morirá más pronto que tarde, buscará escapar.
Escapar del deber, de los trabajos, de las situaciones de pereza... hacer que te muerda una serpiente, que contraigas una enfermedad, que faltes a clase... que al volver, sonrías con petulancia a todo el que se te acerca.
La mordedura de serpiente duele una barbaridad, pero, para Rant Casey, es la forma de verse como algo que está vivo: algo que sangra, que siente, que busca conectar con lo intenso, llenarse de tanta potencia emocional que acabe por reventar.
“My life might be little and boring, but at least it’s mine - not some assembly-line, secondhand, hand-me-down life.”
Rant es precisamente un salvador, al menos para sus seguidores, porque permite cuestionar cada aspecto de la vida, sin ponerlo realmente con palabras: la fe, la confianza, la familia, las fiestas, el amor, la esperanza, la banalidad, el deseo de triunfo... Los personajes que lo conocen van profundizando en su historia, hasta que se genera un fenómeno increíble: de tanto que la figura de Rant se "impregna" de los recuerdos subjetivos de sus seres queridos, acaba por ser más mito y leyenda que verdad.
Dudamos de lo que nos cuentan, de si será real. Cuando nos acercamos al final, que tiene cierto componente de ciencia ficción, ya no sabemos si estamos leyendo sobre una metáfora muy elaborada, o sobre una historia de ficción extrañísima también genialmente elaborada.
Y lo mejor es que no importa, porque, llegados a ese punto, uno no piensa en qué partes serán verdad o no: la historia de la humanidad se forma a través de los recuerdos, y éstos, aunque no sean tan precisos como creemos, son la clave que nos asegura que estamos vivos y hemos experimentado lo suficiente como para que, a lo largo de los días, resolvamos el pasado según nuestra propia interpretación.
La historia de Rant Casey trata realmente de cómo este chico, un loco que adoraba ser mordido por arañas y serpientes y contraer enfermedades muy infecciosas, acaba por dejar de ser humano y pasa a ser una metáfora en sí misma, un recurso que emplean cada uno de los narradores para dar sentido a su propia realidad personal.
Rant es la excusa para que ellos dejen volar su imaginación, para que se replanteen la existencia, para que investiguen acerca de sí mismos y su relación con el mundo. Rant es un puente de conexión entre lo imaginario, es decir, el mundo de las ideas y de los procesos cognitivos y emocionales, y la realidad más puramente objetiva.
Rant es, por tanto, la propia visión de la vida de cada narrador.
Algunos hablan de él como modelo de poder, alguien espectacular que debe ser imitado; y hay otros que lo ven como la solución a muchos de sus problemas, como un salvador... También hay quienes lo ven como el ejemplo de lo que nunca se debe hacer, como un "bicho malo" que no es tan complejo como piensa el resto, sino que solo buscaba ser rebelde...
En cualquier caso, hay que informaros de que no os podéis esperar leer sobre Rant Casey en este libro... ni siquiera cuando toda la historia trata sobre quién es él. Haya sido quien haya sido, ahora está infectado por todas las memorias de la gente a la que marcó de por vida, su imagen nunca será objetiva para nosotros, pero podemos entender, a través de su figura (la cual, como digo, es más mito que verdad, algo infame y sin apenas rostro, algo que va a pasar a la historia), cómo es la visión más colectiva y menos depurada (más "a carne viva") del mundo en el que vivimos: un mundo habitado por humanos, pero que ni siquiera éstos entienden del todo.
“In a world where billions believe their deity conceived a mortal child with a virgin human, it's stunning how little imagination most people display.”
Y por eso, parte de estos humanos se atreve aquí a expresar exactamente cómo ven la realidad. Cómo ven a Rant Casey, quien, fuera o no todas las cosas que dicen que es, significó algo para todos ellos. Él es el recuerdo de una escapatoria que sí que llegó a existir. Y el deseo, la fantasía muy presente, de que esa escapatoria puede volver a abrirse: y que incluso de este mundo lleno de reglas y convenciones y obligaciones, se puede salir: imaginando, deseando, actuando.
Teniendo en mente un modelo, un objetivo... Un virus que ya te ha contaminado tiempo atrás, y que ahora, mientras lo incubas, se va activando. Aunque no sabes qué es lo que hará contigo, yo ya te lo puedo asegurar: la infección que deja Rant Casey en todo lector es, ciertamente, digna de explorar.
Conclusión
En conclusión, Rant me ha parecido una novela buenísima, extraordinaria, con todo detalle y muchísima definición y calidad, una biografía ficticia y "oral" que entremezcla decenas de puntos de vista de manera muy hábil y con mucho ingenio, así haciendo ver que el carisma de la historia está en la subjetividad, en la interpretación, en la metáfora, en la personificación, a veces idealista, de lo que nos salvará de nuestro enfurecimiento personal.
Rant es una novela de muchísimas dimensiones, compleja, con muchos episodios bien definidos y diferenciados, y un estilo sagaz y burlesco que nunca dejará indiferente. Su estudio de la psique humana, ahora llevada a la propia conciencia social y la memoria colectiva, ofrece una visión aún más sucia, abundante y plagada de vivencias de la realidad.
Con una prosa sugerente, temas a tratar muy enganchantes, y un ritmo en la historia decidido y sin parones, Rant es, hasta la fecha, de las novelas más completas e ingeniosas que me he leído en toda mi vida... una historia compuesta por mil millones de historias que, en su conjunto, demuestra que solo existe una verdad: todos creeremos lo que queramos creer, y la libertad que se busca se encuentra en manos de la lucha, del movimiento, de la acción, del hacer algo diferente.
Se trata de ponernos en movimiento, siempre. Incluso a la velocidad de ciento veinte kilómetros-hora a lo largo de una ensombrecida autovía con destino a la muerte...
PUNTUACIÓN
♫ Personajes: 6/5
♫ Acción: 5/5
♫ Trama: 5/5
♫ Originalidad: 6/5
♫ Tensión: 4.5/5
♫ Tensión: 4.5/5
♫ Desenlace: 4/5
♫ Prosa: 6/5
VALORACIÓN PERSONAL: 10.5/10!!!
Más reseñas aquí en el blog La Llanura de los Mil Mundos: http://lallanuradelosmilmundos.blogspot.com/
VALORACIÓN PERSONAL: 10.5/10!!!
Más reseñas aquí en el blog La Llanura de los Mil Mundos: http://lallanuradelosmilmundos.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario