Título: Captive Prince (Captive Prince #1)
Autor: C. S. Pacat
Editorial: Berkley
Canción Identificada: The King Wants You (Avatar)
Sinopsis:
Damen is a warrior hero to his people, and the rightful heir to the throne of Akielos. But when his half brother seizes power, Damen is captured, stripped of his identity, and sent to serve the prince of an enemy nation as a pleasure slave.
Beautiful, manipulative, and deadly, his new master, Prince Laurent, epitomizes the worst of the court at Vere. But in the lethal political web of the Veretian court, nothing is as it seems, and when Damen finds himself caught up in a play for the throne, he must work together with Laurent to survive and save his country.
For Damen, there is just one rule: never, ever reveal his true identity. Because the one man Damen needs is the one man who has more reason to hate him than anyone else…
Opinión:
Nuevamente, escogí este libro para leerme ya que volvía a sugerir una lectura controversial, en la cual me había encontrado muy distantes y diferentes ideas y opiniones acerca de su contenido. Como con la saga de Mark Lawrence de The Broken Empire, este libro había supuesto un gran debate, con ideas muy opuestas: había quien amaba este libro, y otros que lo criticaban exhaustivamente debido a su contenido.
Para empezar, yo ya sabía mediante la reseña que su contenido no era precisamente fácil y sencillo de leer, y al ver las condiciones en las que el protagonista se encontraba me esperaba que me jugase en algunas partes una mala pasada.
Había un ligero problema con esta decisión de leerme este libro... y es que a mí no me gusta este tipo de literatura.
Según mi punto de vista, incluso aunque este libro está catalogado como género romántico, pasaba incluso a los bordes de la novela erótica, mas antes que nada voy a decir que sus escenas no eran explícitas.
Según mi punto de vista, incluso aunque este libro está catalogado como género romántico, pasaba incluso a los bordes de la novela erótica, mas antes que nada voy a decir que sus escenas no eran explícitas.
No era una lectura escandalosa, por lo que si alguien está dudando entre si comprarlo por esa razón, puede estar tranquilo, pero había algunas partes en las que sí creo que este libro merece ser criticado, debido a que aborda temas muy duros y desagradables como la esclavitud, más en el ámbito de la esclavitud sexual, y lo hacía de forma poco acertada, como si fuese una cosa normal, sin criticar estas horribles condiciones.
Empezando por el principio, en mi visión general, este libro ha estado bien, y, de hecho, he decidido darle una segunda oportunidad y leerme su continuación, por ver si hay mejoras en cuanto a la relación de los dos personajes principales.
Captive Prince es un libro en el cual hay poca gama de personajes. Por lo general, todos salían de segundo plano, y sus historias pasadas no eran apenas mencionadas. Esto no tiene, para nada, que ser algo malo (de hecho, casi todos mis libros favoritos carecen de personajes secundarios importantes, y se centran únicamente en sus protagonistas).
En este libro, de hecho, lo importante siempre ha sido el desarrollo y la evolución de estos dos personajes tan distintos que se nos presentan: Damen y Laurent.
Añadir más personajes habría quitado la chispa del libro, porque, si me decidí a cogerlo, no era porque se tratase de una historia romántica y/o de la evolución de la relación de ambos, sino de que quería ver con mis propios ojos cómo evolucionaban los propios personajes al ver lo distintos que eran entre ellos y que, pese a todo, para sobrevivir debía aliarse. Un clásico que, sin embrago, en este libro habría quedado genial.
En este libro, de hecho, lo importante siempre ha sido el desarrollo y la evolución de estos dos personajes tan distintos que se nos presentan: Damen y Laurent. Añadir más personajes habría quitado la chispa del libro, porque, si me decidí a cogerlo, no era porque se tratase de una historia romántica y/o de la evolución de la relación de ambos, sino de que quería ver con mis propios ojos cómo evolucionaban los propios personajes al ver lo distintos que eran entre ellos y que, pese a todo, para sobrevivir debía aliarse. Un clásico que, sin embrago, en este libro habría quedado genial.
Empero, me ha faltado algo más de relación con otros personajes... el libro orbitaba en exceso alrededor de Damen y Laurent, y hubiese estado bien que en esa terrible estancia Damen hubiese conocido a aliados, a esclavos que estuviesen sufriendo, porque con los pocos con los que se encontraba apenas entablaba conversación.
Y lo mismo puedo opinar de Laurent, quien desde el principio era el centro de la historia. Alrededor de Laurent la gente era descrita como planetas, pues Laurent es un príncipe manipulador y lleno de carisma que consigue siempre lo que se propone.
Pero a mí me parecía que, más que planetas orbitando alrededor del sol, eran mosquitas muertas, o, más bien, polillas sin rumbo, que giraban a su alrededor pero no llegaban en ningún momento a mostrar mucha relación con él, es decir, que, aunque estaban, apenas hablaban realmente con Laurent. Había, en realidad, muchas conversaciones, pero en ninguna se sacaba en claro quién era esa persona para Laurent, de qué se conocían y qué quería realmente, y eso hizo que para mí ambos príncipes estuviesen más aislados.
Y lo mismo puedo opinar de Laurent, quien desde el principio era el centro de la historia. Alrededor de Laurent la gente era descrita como planetas, pues Laurent es un príncipe manipulador y lleno de carisma que consigue siempre lo que se propone.
Pero a mí me parecía que, más que planetas orbitando alrededor del sol, eran mosquitas muertas, o, más bien, polillas sin rumbo, que giraban a su alrededor pero no llegaban en ningún momento a mostrar mucha relación con él, es decir, que, aunque estaban, apenas hablaban realmente con Laurent. Había, en realidad, muchas conversaciones, pero en ninguna se sacaba en claro quién era esa persona para Laurent, de qué se conocían y qué quería realmente, y eso hizo que para mí ambos príncipes estuviesen más aislados.
Empezando por Damen, no sé muy bien qué pensar de él... si soy sincera, tampoco me esteraba un luchador dispuesto a dar su vida por su reino, pero tampoco me esperaba que fuese un personaje tan... monótono.
Damen parece estar en el libro tan sólo para lucir su físico, y para hacer de voz narrativa que nos haga descubrir al verdadero Laurent.
Damen no parece tener personalidad... de hecho, se contradecía mucho a sí mismo: a veces era clamado y pensaba con frialdad, decidiendo un plan, mas otras veces simplemente se dejaba llevar por sus emociones (la mayoría de las veces).
Entiendo que uno pueda estar enfadado, las situaciones en las que está sometido son realmente horribles, pero no hasta el punto de dejar a un lado la prudencia y hacer locuras.
Es decir... ha visto con sus propios ojos lo peligroso que es Laurent, un hombre sin sentimientos, al que la gente de Akielos le importa menos que una hormiga, frío, perverso y calculador, que le castiga a la primera de cambio... y es que en la mayor parte del libro le habla como si fuese Damen el superior y el que tiene el poder de los dos. Le habla con superioridad y con burla.
Al. Maldito. Príncipe. Del. Reino. Enemigo.
Damen parece estar en el libro tan sólo para lucir su físico, y para hacer de voz narrativa que nos haga descubrir al verdadero Laurent. Damen no parece tener personalidad... de hecho, se contradecía mucho a sí mismo: a veces era clamado y pensaba con frialdad, decidiendo un plan, mas otras veces simplemente se dejaba llevar por sus emociones (la mayoría de las veces).
Entiendo que uno pueda estar enfadado, las situaciones en las que está sometido son realmente horribles, pero no hasta el punto de dejar a un lado la prudencia y hacer locuras.
Es decir... ha visto con sus propios ojos lo peligroso que es Laurent, un hombre sin sentimientos, al que la gente de Akielos le importa menos que una hormiga, frío, perverso y calculador, que le castiga a la primera de cambio... y es que en la mayor parte del libro le habla como si fuese Damen el superior y el que tiene el poder de los dos. Le habla con superioridad y con burla.
Al. Maldito. Príncipe. Del. Reino. Enemigo.
Tenía ganas de darme golpes contra la pared. no se podía ser más estúpido. Y entiendo que la primera vez se deje llevar por la rabia y el odio, pero es que a la página siguiente lo volvía a hacer.
Damen tenía una actitud muy infantil, que además hacía que se contradijese a veces, pues aunque sus ideales parecía ser honrados, luego cada vez se veía que ni siquiera en eso era maduro: Damen tan sólo penaba en sí mismo, era como un animal enjaulado y perdido que no dejase de pinchar a su captor sólo para que se le castigase, y que, además, tan sólo le importaba escapar... ni siquiera guardaba planes para lo que haría tras lograr esa escapada.
Se lamentaba de su desgracia sin ser consciente de que había muchísima gente a su alrededor que lo pasaba mil veces peor, y se arriesgaba sin pensar realmente en ningún plan, dejándolo todo a la improvisación.
Ahora entiendo por qué su hermano le traicionó... ¿¿quién querría tener a Damen en el trono?? Yo, desde luego, no.
Ahora entiendo por qué su hermano le traicionó... ¿¿quién querría tener a Damen en el trono?? Yo, desde luego, no.
Es cierto que había momentos en los que Damen daba la cara por las personas que lo pasaban de veras mal, pero en realidad nunca llegó a arriesgarse en exceso, y nunca parecía aprender.
La evolución de Damen en este libro ha sido nula, no ha aprendido de sus errores, era infantil y creído, y sólo se preocupaba por sí mismo... en muchos aspectos, me ha parecido un príncipe malcriado, que no sabe ver más allá de sí mismo, y que trata irrespetuosamente a todos a su alrededor, sin importarle las consecuencias.
La evolución de Damen en este libro ha sido nula, no ha aprendido de sus errores, era infantil y creído, y sólo se preocupaba por sí mismo... en muchos aspectos, me ha parecido un príncipe malcriado, que no sabe ver más allá de sí mismo, y que trata irrespetuosamente a todos a su alrededor, sin importarle las consecuencias.
Sinceramente, espero que Damen mejore en el segundo libro, porque la primera impresión que he tenido de él no me ha convencido, es más,a veces me ha parecido insufrible... todo el rato comparaba a Vere con Akielos, como si su reino fuera absolutamente genial, pero en ningún momento se planteaba soluciones, o formas de escapar que no fuesen absurdas.
Respecto a Laurent, como yo ya suponía antes incluso de conocerle, ha sido mi personaje favorito. Con Laurent sí he llegado a empatizar y a ponerme en su lugar, e incluso he llegado a entender algunas de sus acciones.
Laurent es un personaje que me ha gustado mucho. Su personalidad no tenía extraños y bruscos cambios, casi cómicos, como la de Damen, se mantenía estable y fría todo el rato.
La mente de Laurent era retorcida, calculadora y gélida, pero, realmente, no me ha parecido que fuese malvado o cruel, no en exceso.
Es cierto que muchas de sus acciones eran arrogantes, pero la mayoría de las veces en realidad Laurent tan sólo se dejaba llevar por el sistema y la cruel sociedad de Vere. Nunca parecía disfrutar del todo las atroces cosas que les obligaban a hacer a los esclavos, y, aunque despreciaba a Damen, eso era porque tenía tras ese odio y trasfondo oscuro un pasado que le perseguía y que le hacía odiar con tanto ímpetu a Akielos (nación que, aunque Damen afirme lo contrario, también está bastante corrompida).
La mente de Laurent era retorcida, calculadora y gélida, pero, realmente, no me ha parecido que fuese malvado o cruel, no en exceso.
Es cierto que muchas de sus acciones eran arrogantes, pero la mayoría de las veces en realidad Laurent tan sólo se dejaba llevar por el sistema y la cruel sociedad de Vere. Nunca parecía disfrutar del todo las atroces cosas que les obligaban a hacer a los esclavos, y, aunque despreciaba a Damen, eso era porque tenía tras ese odio y trasfondo oscuro un pasado que le perseguía y que le hacía odiar con tanto ímpetu a Akielos (nación que, aunque Damen afirme lo contrario, también está bastante corrompida).
La corte de Vere simplemente funciona de forma distinta. Es horrible, es injusta, y es despreciable, pero es donde Laurent ha sido criado, nada más y nada menos, además, que como su príncipe y heredero al trono tras la muerte de su hermano. Hasta que no cumpla los 21 años, sin embrago, no podrá aceptar este duro rol, así que su tío El Regente es quien mantiene el trono.
Laurent es, sin lugar a dudas, quien más me ha gustado, porque me ha hecho cuestionarme muchas cosas respecto al funcionamiento de Vere.
Tampoco es capaz de cambiar de la noche a la mañana a su reino, y Laurent se siente oprimido tanto por su tío como por todas las personas con las que se relaciona... debido a que no halla el apoyo de nadie, haciéndole desconfiar de todos, pues todos quieren controlarme o matarle.
Esto le ha hecho madurar antes de tiempo, volviéndole frío, apenas humano, sin mostrar sus sentimientos.
Me hubiese gustado que se mostrase más acerca del pasado de Laurent y de su relación con su hermano o con alguna otra persona de la corte, pero también por ello me he cogido el segundo libro, para ver si mejoraba en este aspecto, pues creo que el pasado de este personaje le hará ganar un inestimable valor a la novela, mejorándola en muchos aspectos.
La soledad y la desconfianza de Laurent, al igual que su comportamiento, estaban justificados, y es el personaje que más me ha hecho reflexionar y, lo que es más, conectar con la historia, mostrando lo peligrosa que es la corte, y sin parecer un firme partidario de las atrocidades que les hacen a los esclavos.
¿Mejorará su opinión respecto a los habitantes de Akielos? ¿Podremos ver los lectores más acerca de su pasado, entrar más en su mente y ver sus pensamientos en la segunda entrega? Eso espero, al menos, porque la mente de Laurent era fascinante.
En esta reseña me he centrado mucho con estos dos personajes, pues es que son los principales y más importantes, en los que la historia gira.
Lamentablemente, no me ha gustado su relación... su relación me ha parecido excesivamente lenta, y, además, la escritora se centraba más en la parte erótica y romántica que en lo que esta situación nos debería hacer meditar a los lectores Y A LOS PROPIOS PROTAGONISTAS dentro de la historia, un detalle muy importante y de gran valor que no ha sido sacado en la novela.
Considero que se habría sacado más partido a la historia si, en lugar de centrarse en las escenas románticas, que además mostraban con simpleza y sin crítica la violencia, la esclavitud sexual e incluso las violaciones, se hubiese centrado más en labrar una personalidad al personaje inicial, Damen, y en hacer que éste, junto con Laurent, evolucionasen y descubriesen que no son tan distintos como pensaban (aunque eso sólo lo podremos descubrir cuando Damen al fin se ponga de acuerdo sobre cuál es su personalidad).
Captive Prince es una novela lenta, que apenas tiene giros en la trama o acción, pero que yo he llegado a disfrutar gracias a Laurent, la joya de este libro.
Continuaré con la saga por ver si hay mejoras en Damen, aunque sea una pequeña evolución por su parte, y por continuar averiguando acerca del por qué de las acciones del misterioso y épico Laurent.
Tampoco es capaz de cambiar de la noche a la mañana a su reino, y Laurent se siente oprimido tanto por su tío como por todas las personas con las que se relaciona... debido a que no halla el apoyo de nadie, haciéndole desconfiar de todos, pues todos quieren controlarme o matarle.
Esto le ha hecho madurar antes de tiempo, volviéndole frío, apenas humano, sin mostrar sus sentimientos.
Me hubiese gustado que se mostrase más acerca del pasado de Laurent y de su relación con su hermano o con alguna otra persona de la corte, pero también por ello me he cogido el segundo libro, para ver si mejoraba en este aspecto, pues creo que el pasado de este personaje le hará ganar un inestimable valor a la novela, mejorándola en muchos aspectos. La soledad y la desconfianza de Laurent, al igual que su comportamiento, estaban justificados, y es el personaje que más me ha hecho reflexionar y, lo que es más, conectar con la historia, mostrando lo peligrosa que es la corte, y sin parecer un firme partidario de las atrocidades que les hacen a los esclavos.
¿Mejorará su opinión respecto a los habitantes de Akielos? ¿Podremos ver los lectores más acerca de su pasado, entrar más en su mente y ver sus pensamientos en la segunda entrega? Eso espero, al menos, porque la mente de Laurent era fascinante.
En esta reseña me he centrado mucho con estos dos personajes, pues es que son los principales y más importantes, en los que la historia gira. Lamentablemente, no me ha gustado su relación... su relación me ha parecido excesivamente lenta, y, además, la escritora se centraba más en la parte erótica y romántica que en lo que esta situación nos debería hacer meditar a los lectores Y A LOS PROPIOS PROTAGONISTAS dentro de la historia, un detalle muy importante y de gran valor que no ha sido sacado en la novela.
Considero que se habría sacado más partido a la historia si, en lugar de centrarse en las escenas románticas, que además mostraban con simpleza y sin crítica la violencia, la esclavitud sexual e incluso las violaciones, se hubiese centrado más en labrar una personalidad al personaje inicial, Damen, y en hacer que éste, junto con Laurent, evolucionasen y descubriesen que no son tan distintos como pensaban (aunque eso sólo lo podremos descubrir cuando Damen al fin se ponga de acuerdo sobre cuál es su personalidad).
Captive Prince es una novela lenta, que apenas tiene giros en la trama o acción, pero que yo he llegado a disfrutar gracias a Laurent, la joya de este libro.
Continuaré con la saga por ver si hay mejoras en Damen, aunque sea una pequeña evolución por su parte, y por continuar averiguando acerca del por qué de las acciones del misterioso y épico Laurent.
PUNTUACIÓN
♫ Acción: 2.75/5
♫ Personajes: 3.25/5
♫ Originalidad: 3/5
♫ Trama: 3.25/5
♫ Desenlace: 3.25/5
♫ Pluma: 3.5/5
♫ Originalidad: 3/5
♫ Trama: 3.25/5
♫ Desenlace: 3.25/5
♫ Pluma: 3.5/5
VALORACIÓN PERSONAL: 8.75/10
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