Reseña: El Curioso Incidente del Perro a Medianoche

Título: El Curioso Incidente del Perro a Medianoche
Autor: Mark Haddon
Editorial: Salamandra
Canción Identificada: Walls (The Color Morale)


Sinopsis:

Christopher es un joven de 15 años que descubre al perro de la vecina señora Shears asesinado. Este hallazgo hará que se decida a investigar esta extraña muerte como un detective, siguiendo los pasos de su ídolo Sherlock Holmes y aplicando todos sus conocimientos de lógica deductiva. La investigación se convertirá en un proceso de aprendizaje para el protagonista que le hará conocer la realidad de su vida familiar y un poco más del pequeño mundo que le rodea.

Reseña:

Guau. ¿Cómo es que un libro tan corto puede llegar a transmitirme tanta sensación de vacío y de absoluta euforia al terminar de leerlo?
Este libro no es como ninguno que me hubiese leído antes. Creo que jamás he presenciado tanto caos en una novela. Ha sido... ¿cómo describirlo? 
Desorbitante. Chocante. Sorprendente.

La historia nos es contada desde el punto de vista del protagonista, la joya de la novela de principio a fin, Christopher, un chico de 15 años que no es como el resto de los de su edad. Christopher es superdotado, con síndrome del Asperger (características del autismo), que vive con su padre desde el fallecimiento de su madre. 
Puesto que Christopher es distinto, no es muy partidiario de las relaciones sociales y es muy preciso y metódico, creando a su alrededor unas murallas que le separan de la realidad. Christopher se toma todo al pie de la letra, siempre en el sentido literal, lo que a veces hace que sea desquiciante hablar con él, y el lector muchas veces se siente frustrado o incapaz de comprenderle.

Me gustan los horarios porque me gusta saber cuándo van a pasar las cosas.

Esta es una de las cosas que más me han gustado: Mark Haddon nos hace sentir al mismísimo personaje, la voz narrativa de la historia, como un extraño, alguien lejano e inalcanzable, distinto y por lo tanto increíblemente original e interesante.

La gente siempre piensa que hay algo especial en lo que no puede ver, como el lado oculto de la luna, o el otro lado de un agujero negro, o en la oscuridad cuando se despierta por la noche y tiene miedo.

Christopher nunca se ha preocupado en exceso por ser así; él vive e su propio mundo, un mundo relacionado con las matemáticas y lo racional, donde todo está cuadriculado y medido con precisión... Christopher odia el desorden: por ejemplo, si los guisantes tocan las zanahorias, que son de otro color, ya no es capaz de comerse la comida, y aborrece los alimentos de colores amarillos o marrones. Así que sí, podemos decir que este chico es una persona muy especial.
Pero no sólo eso: debido a ello, Christopher se ha convertido en uno de los personajes ficticios más asombrosos y complejos de todas las novelas que me haya leído. 

Normalmente, la gente te mira cuando te habla. Sé que tratan de captar lo que estoy pensando, pero yo soy incapaz de captar lo que piensan ellos. Es como estar en una habitación con un espejo de un solo sentido en una película de espías.

Para nuestro protagonista el mundo es una extraña ecuación sin orden alguno que trata de comprender o al menos ser capaz imitarla: para él los impulsos humanos son algo ajeno, fuera de lugar que no tienen ningún sentido, lo que le hace tener grandes problemas a la hora de interaccionar o estar en un mimo entorno. Mucho menos., digamos, entablar una conversación. Porque al ser literal, resulta desquiciante tratar de hablar con él; aunque eso me ha parecido un detalle muy, muy interesante y muy acertado por parte del escritor que a mí me ha parecido muy entretenido e incluso divertido de leer. 

Un símil no es una mentira, a menos que sea un símil malo.

El libro es muy corto, y sin embargo no sé por dónde empezar a hablar, porque ha sido absolutamente genial. 
Un día, ocurre una cosa que cambiará la vida de Christopher por completo: el perro de su vecina es asesinado; y entonces Christopher decide hacerse cargo del caso, siguiendo los pasos de su detective favorito: Sherlock Holmes.
Esta investigación, empero, comienza a tomar un rumbo arriesgado para su tranquila vida, alejándole de su vida diaria y de su ámbito en calma y alejado del resto del mundo, y se adentra en un terreno peligroso, donde él no tiene el control de la situación, y donde todos parecen estar ocultándole cosas... incluso su propio padre. ¿Qué ocurre con las personas a su alrededor? ¿Qué le ocultan, y en qué está relacionado con el asesinato del perro de la vecina?

Las matemáticas no son como la vida, porque al final en la vida no hay respuestas sencillas.

La novela, la cual yo en un principio pensé que sería una novela detectivesca juvenil, se va tornando en algo más dramático que cualquier adulto adorará. Y es que nada es lo que parece, y muy pronto todo el mundo de Christopher comenzará a desmoronarse al verse envuelto en tantos misterios y secretos y acabar averiguando la verdad... Mientras transcurre esta investigación, vamos viendo más retazos de la peculiar personalidad del protagonista, mientras éste nos plantea grandes problemas matemáticos en relación con el misterio que a mí me resultaron muy entretenidos. 

Una cosa es interesante porque pensamos en ella, no porque sea nueva.

Y esto es alucinante. Desde el primer momento, Mark Haddon nos muestra a un personaje muy estructurado, que odia las imperfecciones y las cosas imprevistas. Todos estos rasgos penden en un precipicio, y a menor cambio toda su vida podría desmoronarse por completo. Nos muestra a la perfección con los ojos del protagonista cómo es su realidad, precisa y ordenada... y entonces comienza a añadir más y más elementos, hasta que todo se viene abajo con una brusquedad tan cruda y cruel que nos da un frío golpetazo en la cara y nos deja anonadados, clavados en nuestro sitio.

La prosa es fantástica.

 Jamás había visto una forma de escritura tan directa, tan cruda y tan dura. Combina a la perfección con la cerrada mente del protagonista; y el conocimiento que el lector tiene de la situación o de la trama en general empieza siendo reducido y estrecho, y poco a poco nos va mostrando cómo es la historia, pero un entonces no sabemos qué ocurrirá a continuación, o cómo reaccionará nuestro personaje ante estos cambios tan bruscos y espontáneos.
El valor de la familia se irá desintegrando junto a todas las verdades que Christopher creía conocer, y todo esto, teniendo en cuanta cómo es, le hará dar una gran evolución al personaje fantástica y sorprendente. Su evolución me ha encantado, y la historia, en primera persona, estaba tan bien narrada que era capaz de sentir la misma tensión y angustia que su personaje, era capaz de sentir cómo debía ser estar en su mente... que parece muy ordenada, pero luego se transforma en un caos y en un infierno.
Es entonces cuando Christopher debe dejar a un lado la lógica y abrir los ojos a una terrible y arrolladora verdad: la realidad.

Los números primos son como la vida. Son muy lógicos pero no hay manera de averiguar cómo funcionan, ni siquiera aunque te pasaras todo el tiempo pensando en ellos.

Podría tirarme horas hablando de su protagonista, y de la forma de escritura. Mark Haddon escribe de una forma que antes jamás había visto, entrelazando el orden con el caos y la desesperación. Ha sido una experiencia maravillosa el entrar en la cabeza de Christopher, y a la vez estremecedora y arrolladora. 

Una novela completamente distinta a cualquier otra, con un estilo único, duro y muy intenso. Completamente recomendada. 

PUNTUACIÓN

♫ Acción: 3.25/5

♫ Personajes: 5/5
♫ Originalidad: 4.5/5
♫ Trama: 4/5
♫ Desenlace: 3.5/5
♫ Pluma: 5/5

VALORACIÓN PERSONAL: 10/10