Reseña: Utopía

Título: Utopía
Autor: Thomas More
Editorial: Editorial Ariel
Canción Identificada: Utopia (Björk)




Sinopsis:


Bien es sabido que Tomás Moro (1478-1535) no inventó la utopía como género literario, pero es innegable que su "Utopía" le ha dado el nombre. Tampoco se puede negar que, exista o no convergencia con sus planteamientos, la propuesta de Moro innovó significativamente la literatura política. 

"Utopía" es una crítica al orden social establecido en la Europa de la época, pero el sistema político que propone y describe minuciosamente en sus páginas es también una alternativa al mismo, de tal forma que, como señala Savater, la contradicción de la obra, y la nuestra propia, al considerar lo que en realidad es un ejercicio literario de denuncia moral como un programa político que, revolucionario en sí mismo, no admite la revolución ni la disidencia. 

El hecho de que Moro obvie en sus planteamientos el reconocimiento de la libertad humana confiere a "Utopía" la irracionalidad de la que huye, la imprevisibilidad que le niega el autor. Porque más allá de la utopía colectivista siempre está el ideal de la persona libre.




Opinión:

Utopía, de Thomas More (traducido su nombre al castellano como Tomás Moro), es un libro que plantea varias corrientes de ideologías políticas y sociales y expone una sociedad "utópica", nunca mejor dicho, puesto que el nombre de "Utopía" se lo debemos, única y exclusivamente, a este escritor, que ha inspirado a toda una sociedad a lo largo de los siglos con su libro, y ha dado pie a que se inicie un nuevo género literario.




Libro especialmente recomendado si se quiere profundizar en la filosofía política, Utopía es una narrativa sencilla, que pone sin embargo especial detalle en cada punto concreto del mundo que es creado en en libro: desde el color de las vestimentas hasta el tipo de bebida que los agricultores toman, el sistema monetario, las actividades diarias y rutinarias de los habitantes, el matrimonio, la descendencia, la educación y el tiempo libre. Utopía, que planteaba ser una sociedad ideal, se me antoja tan ceñida, tan llena de normativas y de horarios, de leyes y en especial de límites, que me viene a la cabeza que esto esté privando a sus habitantes de una libertad necesitada.








Mi interpretación es una entre el montón: a lo largo de los tiempos (y mucho tiempo ha pasado desde que fue escrita), Utopía ha dado paso a muchas discusiones, a muchos eternos debates, opiniones y percepciones que aun ahora siguen en línea de batalla enfrentadas las unas con las otras. 

Elegir el significado de la obra, decidir si se puede coger inspiración de ciertas partes de ella o no, está a la mano del propio lector. 






Cabe preguntarse: ¿era More un hombre que planteó una ensoñación, un inalcanzable ideal, o era un hombre que hacía una determinada y afilada crítica contra el sistema de su época, proponiendo como arma y ofensa esta obra? 

¿Hay burla en las jerarquías que se encuentran en la aparentemente maravillosa isla de Utopía, More se está jactando de algo... o por el contrario, cree firmemente que el rigor político de Utopía es necesario para un bien común?

Utopía, que etimológicamente significa "buen lugar" o "no-lugar" (lugar que no existe... pero que puede llegar a existir) es una isla donde está una sociedad imaginada, libro que se divide en dos partes: la primera, que trata de un análisis y una crítica de la Inglaterra de la época (siglo XVI), con mercaderes, comerciantes, ricos codiciosos, y pobres que pasan hambre y roban y mendigan en las calles; y la segunda parte, que trata acerca de la descripción de la sociedad en Utopía, con una elevada justicia y un seguro bienestar. 




Utopía es una isla que cuenta con una sociedad "igualitaria": hay igualdad económica (no existe el dinero), educativa y entre sexos... Supuestamente. 

Puesto que a medida que te vas metiendo en el libro te vas dando cuenta de que no todo es como debería ser: por ejemplo, a nivel familiar el hombre tiene un rolo mucho más elevado e importante que la mujer, y se explica que ejerce dominio sobre ella. De manera que, pese a que ambos tengan los mismos trabajos en las mismas condiciones, no hay igualdad entre ellos. 





Luego, algo que destaca de la sociedad de Utopía es que no hay interés individual, sino que todo va a parar al bien colectivo... 



Por tanto, nos encontramos hablando de un comunismo que, como suele pasar con las ideologías comunistas, queda demasiado distante, demasiado inalcanzable: claro que un comunismo en la teoría es radiante... pero puesto en práctica, acaba en la corrupción, en el engaño, o en un imposible. 


En esta vida comunitaria, cada persona ejerce formas de interactuar cooperativas, y su democracia es directa/participativa. 


No existe la propiedad privada, algo que también recuerda a un comunismo en estado puro, y no hay horario de explotación en el trabajo: la jornada es equilibrada, y permitidme decir que también demasiado ajustada y rigurosa: seis horas de trabajo, ocho horas de descanso, y diez horas de ocio. 

El ocio de la sociedad es colectivo, las actividades son cooperativas, no hay casi espacio o tiempo para estar con uno mismo.






En cuanto a la educación, ella es para ambos sexos, y hay espacio para la teoría y la práctica. 

Es integral, en todos los aspectos. 

El principal foco de atención que tiene la educación es la formación moral. 

Su educación también proporciona a sus habitantes una tolerancia y libertad religiosa (el apartado de la religión en el libro es muy bueno), y no existe la guerra, ni la ofensiva, y los gobernantes son elegidos entre los representantes de las familias. 





No obstante, y como momento de crítica a este sistema, hay diversas teorías que indican que Utopía está sujeta a un orden inexorable, y que cualquier cambio en ella, cualquier desvío, puede llevar a su desaparición. 


Además de eso, su sociedad está demasiado planificada, tiene demasiado detalle, las actividades sociales están reglamentadas y hay un férreo dirigismo social. 


Sus habitantes no son sujetos libres, y tampoco tienen capacidad autónoma de actuación: los grupos sociales están exageradamente indiferenciados (por lo que no hay clases sociales con intereses contrapuestos), y su forma de actuar, desde creencias, a actitudes, personalidad, acciones e ideas son demasiado previsibles, demasiado pautadas. 



Por tanto, nos hallamos ante un orden que indiscutiblemente es autoritario, y tiene este poder mediante la educación, la cual tiene el propósito de ordenar y uniformizar, enseñando valores opuestos a la diferencia, a la disidencia, como instrumento de adaptación a unos esquemas sociales previamente diseñados... La gente no es capaz de modificar lo que existe, puesto que la educación es coactiva, y priva de libertad. 



Si bien las utopías pueden ser positivas a manos del pueblo, que es el que padece el poder del Estado (puesto que está visto como una meta a seguir, un objetivo que lograr, un camino que trazar), a manos de la clase dominante es una ideología, un arma... Como ocurrido en la Unión Soviética, se sirve de la utopía del paraíso comunista para exigir sacrificios a la población, hablando de un esperado futuro que en ningún momento va a llegar.








Ligero y muy entretenido, Utopía es una lectura que hace un detallado análisis de una sociedad que intentaba ser la ideal para todos, escrita de manera muy precisa y detallada, perfecto para hacer un profundo análisis, que además resultará muy difícil de llevar a cabo, con mucha ambigüedad en el libro y sin saber muy bien el tono que emplea el escritor (si mofoso, o si serio). 


Utopía, libro controvertido y un ejemplo de mundo que seguir, o, por el contrario, denegar, es una lectura sumamente interesante, escrita de manera sencilla y precisando cada detalle de la isla, que ha traído incesables debates a nuestra sociedad, y que ha llegado a erigir ciertos cimientos de la misma con sus palabras.

VALORACIÓN PERSONAL:  7.75/10



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